La Bomba para los más chicos
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Christopher está en el centro de la escena.
Christopher y su vulnerabilidad en primer plano.
Christopher y sus miedos. Christopher y sus poderes.
¿Acaso es Christopher diferente a lo diferentes que de un modo u otro somos todos?
El Curioso Incidente del Perro a Medianoche, obra ganadora de los más importantes premios, se ha instalado en el escenario del Maipo, con el despliegue escénico que propone The Stage Company.
Comandada por Carla Calabrese, quien dirige y va llevando la interpretación del texto en vivo, la historia es la historia de un chico con Asperger, un as para el pensamiento matemático y a la vez un chico con una debilidad profunda para poder entablar vínculos cercanos con otras personas, incluso con sus padres.
Y aparece el perro del título, o mejor dicho desaparece, para comenzar así un viaje de plena curiosidad para entender qué pasó con el perro, qué pasa con los padres de este chico y sobre todas las cosas qué le pasa a un chico al que el mundo parece atacarlo constantemente.
¿Cuándo y dónde estar a salvo?
La obra está basada en un libro que ha conmovido a lectores de todo el mundo y de toda edad y que ha sido tratada como material de estudio en los colegios, por eso en las funciones del Maipo es realmente hermoso ver decenas de chicos muy jovencitos, algunos de ellos acercándose por vez primera a la ceremonia teatral.
Iñaki Aldao es sencillamente un hallazgo, pura entrega en este primer protagónico jugado, omnipresente, dramático y poético a la vez.
Iñaki hace volar a su Christopher y uno siente solamente que quiere abrazarlo. Pero no, no podemos tocar a Christopher. Sólo podemos acompañar su viaje.
Los padres de Christopher, con las sentidas actuaciones de Pablo Alarcón y Mela Lenoir, nos llenan de congoja al ver los efectos de las decisiones adultas en el mundo de un adolescente.
El elenco, que va de Pablo Sultani a Agustín Pérez Costa, tiene también una gloria en las tablas, Adriana Aizemberg, que verla ya es puro goce.
Técnicamente El curioso incidente…es una pieza de relojería. Visual, coreográfica, narrativa…¡hasta matemáticamente!.
Bella, realmente bella.
Esta es una puesta llena de luz, por sobre todas las cosas, donde todo conduce a dilucidar el famoso curioso incidente y a conocer un poquito más en profundidad el alma humana.