NIVANGIO: despedida de una aventura
2 agosto, 2018FAMILIA CAFF Segunda edición
3 agosto, 2018Hace 10 años Gabo Ferro presentaba su disco “Amar, temer, partir”.
“Qué cosa extraña el recuerdo, recuerda raro el olvido…no muestra lo que tengo, me muestra lo que tuvimos…”
Me acuerdo de haber salido con la cara desfigurada por el llanto.
Y me acuerdo de ver otras caras y pensar: ¡qué bueno! En estos conciertos los hombres se permiten llorar.
Todo el mundo conmovido por Gabo, ese ser chiquito-gigante.
Pasaron 10 años del disco anaranjado, de ese gladiador de la canción en llamas, ángel y demonio, el hombre del desgarro y la liberación.
Amar, temer, partir.
Dicen que aquella obra que te atraviesa, te sacude y te eleva, es una obra de arte.
Y este sábado, nos preparamos para la entrega. Y para el disfrute. La fruta que disfruto! Preparados para La casa, nuestros discos, para Volví al jardín, para Voy a montar un caballo.
Ahí va nuestro cuerpo al fuego de su escena Señor Ferro, conjugue tranquilo, que aquí estamos.
Dice Gabo:
“Dentro de las clases de Lengua de los primeros años en la escuela nos enseñan a leer y a escribir para después aprender a conjugar los verbos regulares.
AMAR, TEMER y PARTIR son los verbos elegidos en esta gramática para que funcionen como modelo y repitamos a los seis o siete años:
Yo amo, yo temo, yo parto
Tu amas, tu temes, tu partes
El ama, el teme, el parte
Nosotros amamos, nosotros tememos, nosotros partimos
Vosotros amáis, vosotros teméis, vosotros partís
Ellos aman, ellos temen, ellos parten
Ni Ella ni Ustedes aman, temen ni parten dentro del universo de la educación formal. A Ella se la tragó El y a Ustedes el para nosotros lejano – en espacio y en tiempo – Vosotros. Así aprendemos y asimilamos no sólo que todos los verbos terminados en AR, ER, IR cambian su desinencia en la misma forma, sino también la relación que pareciera existir entre estas acciones”