Hidalgo. Marull x Marull

La cosa es que Bartolomé Hidalgo fue el pionero de la poesía gauchesca en el Río de la Plata. En Uruguay, se conoce el 24 de agosto como «Día Nacional del Payador», en referencia al nacimiento del buen Bartolomé.

Y resulta que hace un tiempo, a pedido del TNC y por los 200 años de la Independencia, a María Marull se le encargó que hiciera un trabajo para homenajear la figura de este poeta revolucionario.

Hidalgo murió pobre, en Morón y la verdad es que nunca se supo mucho sobre él.

Pero ahí recogió el guante Marull, María y le pidió a Marull, Paula, su hermana, su espejo, que protagonizara con Daulte, Agustín, el brillante hijo del brillante papá Javier.

Un espacio acotado y deseado.Un pequeño departamento como una casa tomada por el hijo del encargado, que si en algo piensa el chico, seguro eso no es en irse del departamento en cuestión. La mujer no llega al departamento, arrasa el departamento y todo a su paso hasta él,el chico y su ahí nomás.

Ella quiere vender, necesita venderlo ya. Y terminar con sus miserias.

El necesita apenas terminar con un trabajo que le encargaron en el colegio. O terminar con sus miserias.

Y de los mundos que no pueden unirse, de las urgencias vertiginosas de las ciudades, explota este destello de pensar y mirar aunque sea por un rato, a un otro.

Brillantes textos viene escribiendo hace rato María Marull y esta no es la excepción.
Paula y Agustín.

Marull y Daulte, los otros, son ellos, son todos, somos nosotros.

Doble función y reservando con tiempo…El Camarín de las Musas.