ARTEMA: Arte Magistral
23 octubre, 2018Casa del Teatro, en cine
24 octubre, 2018No tengo dudas. Alejandro Tantanián ama el teatro.
Intuyo que su gestión en la dirección del Teatro Nacional Cervantes va a ser recordada por sus bellas osadías y por invitarnos a adueñarnos del Teatro Nacional de todos los argentinos.
Algo de eso se me cruzó por la cabeza al asistir a una función de Sagrado Bosque de Monstruos, la obra que dirige el propio Tantanián y que en estos días nos ofrece la Sala María Guerrero, como nunca antes.
Esta obra es un regalo para todos los que amamos el teatro.
No hay mucho para decir, simplemente porque no está nada bien robarse el asombro del espectador.
Sólo diría que hay que jugar a entregarse, desde el preciso momento del ingreso, ya al seguir las indicaciones de los acomodadores.
Sagrado Bosque de Monstruos, concepto de Oria Puppo y Tantanián, fue escrita por Inés Garland y Santiago Loza y es mucho más que una obra de teatro.
Hay un dispositivo lúdico y de disfrute desde el vamos.
La enorme Marilú Marini junto al poeta, filósofo, sacerdote Hugo Mujica nos van a introducir en una contemplación que a la vez es un diálogo y un ensayo sobre el arte, las misteriosas formas de la actuación y la creación y hasta el fabuloso tiempo del Di Tella, incluido un homenaje emocionante al director Roberto Villanueva.
Lo que vendrá luego es magia, desparpajo, puro talento de un grupo diverso, sólido en la palabra y en los movimientos.
Una creación que va serpenteando entre la vida de Santa Teresa de Jesús, el mundo de los libros, la actuación, la vida real y las ficciones, las construcciones y hasta la piedra fundamental de la sala.
Y habrá grandes momentos y grandes aplausos para Iván Moschner, Rodolfo de Souza, Cristián Jensen, Eugenio Schcolnicov, Diego Benedetto, Ernesto Donegana, Juan Gabriel Miño, Matías Pisera Fuster, Camilo Polotto.
Para Marilú Marini aún no hay palabras que le hagan justicia a su actuación. Verla, ver sus criaturas, es ver el mundo.
Por si fuera poco, las canciones interpretadas por Julieta Venegas, en algunas de esas noches, son un abrigo para el alma.
Sagrado Bosque de Monstruos es un encuentro como pocas veces uno vaya a tener con el corazón del teatro Cervantes.
Allí palpitan las vivencias de lo mejor de los hacedores de nuestra escena teatral.
No se priven de ver esta experiencia conmovedora, de atesorar anécdotas, impresiones, entregas de actuación profundas, desde todos los rincones misteriosos de la María Guerrero.